Por: Victor Manuel Arce Garcia07 de abril de 2025

Jeannette Jara deja el Ministerio del Trabajo entre vítores y temores para lanzarse a la presidencial

Con una mezcla de aplausos, tumultos y una confesión sincera —“me gusta, pero me asusta”—, Jeannette Jara abandonó este lunes el Ministerio del Trabajo manejando su propio auto, tras renunciar formalmente para asumir la candidatura presidencial del Partido Comunista. Su salida, celebrada por partidarios, marca el inicio de una carrera electoral que promete intensidad, aunque deja interrogantes sobre el uso del cargo público en su ascenso.

Jeannette Jara - Agencia Uno

Santiago, Chile, 7 de abril de 2025 – La ministra del Trabajo, Jeannette Jara, protagonizó este lunes una salida caótica y cargada de simbolismo al renunciar a su cargo para lanzarse como candidata presidencial del Partido Comunista. Acompañada por aplausos y vítores de sus seguidores, Jara abandonó el edificio del Ministerio del Trabajo manejando su propio vehículo, un gesto que buscó proyectar cercanía y determinación. “Me gusta, pero me asusta”, confesó ante la prensa sobre el reto que implica la contienda electoral, palabras que reflejan tanto su ambición como las incertezas de un camino político complejo.


El anuncio de su candidatura, que iniciará formalmente este martes, marca un giro significativo en el panorama político chileno. Jara, conocida por su gestión en temas laborales y su perfil progresista, intentará consolidar el respaldo de las bases comunistas mientras enfrenta el desafío de ampliar su apelación en un electorado polarizado. Su partida del ministerio no estuvo exenta de desorden: el entusiasmo de sus partidarios generó tumultos que complicaron el tráfico en el centro de Santiago, un reflejo del fervor que despierta su figura, pero también de la falta de planificación en un momento clave.


Desde una perspectiva crítica, la salida de Jara plantea preguntas sobre su preparación para liderar una campaña presidencial. Si bien su carisma y conexión con los movimientos sociales son innegables, el tono dubitativo de su declaración inicial podría interpretarse como una señal de inseguridad ante las exigencias de una carrera nacional. El Partido Comunista, aunque influyente, enfrenta el reto de transformar su base militante en un apoyo transversal, algo que Jara deberá abordar con una estrategia clara y una narrativa que trascienda las consignas ideológicas. Su gestión en el Ministerio del Trabajo, enfocada en reformas laborales, le otorga credenciales, pero también la expone a críticas por resultados mixtos en un contexto económico desafiante.


La escena de este lunes, con Jara al volante y sus seguidores coreando su nombre, tiene un aire cinematográfico que podría fortalecer su imagen como una líder cercana al pueblo. Sin embargo, el éxito de su candidatura dependerá de su capacidad para convertir ese entusiasmo en una propuesta sólida y un liderazgo consistente. Por ahora, el telón se levanta en una carrera presidencial que promete ser tan apasionada como impredecible.

La Precandidata Presidencial Jeannette Jara Renuncia al Ministerio del Trabajo