Sequía: ¿Qué son los jardines tolerantes?

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Hace 1 año

Desde hace 14 años Chile está atravesando una sequía prolongada. Esto ha hecho de la conservación del agua una prioridad. Un jardín tolerante a la sequía usa plantas que pueden crecer y prosperar con cantidades mínimas de agua.

A lo largo de Chile, especialmente en ciudades de Atacama y la Araucanía, se expresan los síntomas de una crisis climática, como la falta de precipitaciones y la desertización.

Aproximadamente un 72% del país sufre la sequía, ya que está reduciendo el acceso de los ciudadanos al agua y degradando los suelos para uso comercial o personal. Esto requiere adaptarse a nuevas necesidades hídricas.

El jardín es una de las áreas donde más se malgasta el agua, ya sea por riego excesivo o por especies que necesitan demasiada hidratación. Un desafío para todos los jardineros y jardineras es mantener huertos que cuiden el planeta

Así surgen los jardines tolerantes a la sequía, una popular alternativa de cultivo que usa plantas con bajo consumo de agua. A esta práctica también se le llama xerojardinería y es usada en el diseño de exteriores.

¿Cómo tener un jardín casi sin agua?

Esta jardinería busca ser amigable con el medioambiente desde el diseño del espacio, las plantas escogidas y la irrigación hasta el uso inteligente del suelo. Para esto hay 7 principios fáciles de aplicar a un jardín personal.

Diseño para la conservación del agua

Un jardín de bajo consumo requiere planificación. Para esto hay que evaluar el sitio que albergará nuevas especies, reconocer espacios de luz y sombra y disponer una ubicación para las próximas plantas.

Antes de plantar, es bueno agrupar especies con la misma necesidad de agua e iluminación. Los grupos pueden ser separados con límites de concreto para diferenciarlos.

Enmendar el suelo

Aunque estos jardines requieren menos agua, necesitan que la tierra sea rica en nutrientes. El suelo debe tener un balance entre la conservación del agua para un riego eficiente y un drenaje adecuado que no dañe las raíces.

Para encontrar ese equilibrio, es bueno medir el pH del suelo. La materia orgánica es una opción para balancear pisos ácidos o alcalinos, así que puedes agregar composta o estiércol.

Reducir el pasto

Un jardín con césped gasta 10 veces más agua que uno sin él. Las áreas con pasto consumen mucha agua y tienen poca capacidad de retención porque se les mantiene corto y el riego se evapora rápidamente.

Para evitar este gasto, es recomendable reducir lo más posible las áreas dedicadas al césped y reemplazarlo con especies cubresuelos y pasto nativo similar a las praderas.

Escoger las plantas adecuadas

Los jardines resistentes a la sequía necesitan especies de bajo consumo de agua, pero esto no significa tener pocas plantas. La xerojardinería se beneficia de la biodiversidad, así que se pueden usar diferentes alturas, colores y texturas.

Hay que preferir las plantas nativas, cactus y suculentas. También se pueden instalar jardines verticales que no necesitan riego. Un distribuidor en Chile es Instagreen.cl.

Usar mantillos en la tierra

Los mantillos o acolchados orgánicos son una buena forma para prevenir la evaporación del agua y la degradación del suelo. Además de disminuir el crecimiento de hierbas.

Estos se usan para cubrir la superficie de la tierra, al igual que un manto, y mantiene la humedad en el suelo. El más común es la corteza de madera.

Riego eficiente

Es esencial evitar el riego excesivo de las plantas. La irrigación debería ser precisa a las necesidades de cada especie o grupo, ya sea manual, con rociadores o por goteo. El acolchado orgánico ayudará a la conservación del agua.

Mantención ligera

Todos los jardines necesitan atención y cuidados, pero la combinación de estas recomendaciones debería resultar en una mantención leve. Un jardín tolerante a la sequía debería tener una estética única, así que no hay que podar demasiado y dejar que las especies prosperen a su ritmo.